Susuky Cortez Leo / El Diario

miércoles, 11 agosto 2021 | 16:27

Aun con la emoción a flor de piel de los Juegos Olímpicos de Tokio, este jueves 12 de agosto llegará a la pantalla grande el estreno del documental denominado ‘El Gran Salto’ del cineasta chihuahuense Jorge Porras Gamboa, de 35 años de edad; el filme que aborda el sueño olímpico de los hermanos Rivera, una familia de grandes atletas. 

En la ópera prima se sigue la preparación de Luis Rivera, el mejor saltador en la historia de este país, en su búsqueda por el pase a sus segundos Juegos Olímpicos durante el año 2016. También se comparten detalles de la preparación de su hermano Edgar Rivera, quien representó a México en los Juegos Olímpicos en Tokio. 

La historia de los hermanos Rivera llega a la pantalla grande bajo el sello de Cinépolis +QUE CINE, proyecto independiente y el primer documental de atletismo que se hace en México, que busca fomentar la cultura del atletismo y el valor de la unidad familiar a través del cine. 

“Me siento muy afortunado, porque no habido documentales deportivos que lleguen a cartelera nacional y películas independientes son muy pocas, y añadido a esto el estreno se llevará a cabo después de los juegos olímpicos”, dijo emocionado el cineasta chihuahuense Jorge Porras en entrevista para El Diario.

CINE DEPORTIVO

El chihuahuense es un apasionado del deporte, documentó los entrenamientos y las distintas competencias clasificatorias de Luis durante los meses previos a Río; sus primeros logros mundiales y la lucha contra una dolorosa lesión, incorporando testimonios y videos familiares de su infancia al lado de sus tres hermanos, en su natal Agua Prieta, Sonora.

FACETA PERSONAL

Pero, más allá del deportista de alto rendimiento, el filme acercará a los espectadores a la faceta personal, del atleta recién casado y estudiante del Doctorado en Ingeniería Industrial y conferencista, que busca encender en el corazón de los pequeños la llama del amor por el deporte.

SER EMPÁTICOS

Fueron cinco años de producción, el documental fue grabado en cinco países, tres años de posproducción y finalmente en cartelera después de ocho años de trabajo. “Es un proyecto familiar, de amigos de atletismo que me encanta y ahora que pasaron los juegos olímpicos donde sucedieron cosas buenas y no tan buenas, la gente comenzó a exigirles medallas, comentarios muy fuertes, para mí es muy difícil entender, porque conozco a deportistas sé su ciclo olímpico y todo lo que hay detrás de ellos. “Esta es una buena oportunidad para que la gente vea esa empatía con el atleta, una gran ventana para conocer historias auténticas con las que nos podemos identificar y sentir más cerca lo que significa para un atleta el seguir un sueño como los Juegos Olímpicos.