Según estudio, realizar pequeños esfuerzos de actividad física intensa reducen casi el 50% en el riesgo de mortalidad
Agencias
viernes, 30 diciembre 2022 | 07:33Dos investigaciones publicadas en European Heart Journal con datos de más de 70 mil adultos concluyeron recientemente que apenas 20 minutos de actividad física vigorosa a la semana podrían reducir la mortalidad por todas las causas y reducir el riesgo de enfermedades cardíacas en un 40%.
Basándose en los mismos datos y examinando los registros de 25 mil personas que no hacían ejercicio con regularidad, con una edad promedio de alrededor de 60 años, y un seguimiento de casi siete, los investigadores de la Universidad de Sidney han publicado un nuevo artículo, en el que aseguran que pequeñas ráfagas de apenas un minuto de ejercicio intenso durante las rutinas diarias (cargar la compra del supermercado a casa, caminar a un ritmo más elevado hasta el trabajo o subir escaleras, por ejemplo) podrían tener un gran impacto sobre la salud de las personas más sedentarias.
Actividad física vigorosa
Es lo que los científicos han bautizado como “actividad física vigorosa de estilo de vida intermitente” (VILPA por sus siglas en inglés), una actividad física realizada durante las rutinas que, para Stamatakis, tiene importantes ventajas prácticas sobre el ejercicio estructurado al no requerir ningún gasto, arreglo especial o compromiso de tiempo, ni tampoco desplazamientos hasta una instalación deportiva.
“En nuestra investigación encontramos que apenas entre tres y cuatro ráfagas de VILPA de un minuto cada una al día se asociaron con una reducción de casi el 50% en el riesgo de mortalidad relacionada con enfermedades cardiovasculares en comparación con las personas que no llevaban a cabo ese ejercicio; y de casi el 40% en el riesgo de mortalidad por todas las causas y por cáncer. No nos sorprendió encontrar asociaciones beneficiosas porque sabíamos que la actividad física vigorosa es muy potente, especialmente cuando es intermitente y repetida, pero sí nos sorprendió la gran magnitud de las asociaciones considerando la poca actividad física diaria que implicaba el VILPA en términos de duración total”, argumenta el autor.
Hay que movernos
Los resultados de la investigación mostraron mayores beneficios para la salud cuanto más ráfagas de ejercicio intenso se realizaban. Concretamente, el máximo de once ráfagas de VILPA al día se asoció con una reducción del 65% en el riesgo de muerte cardiovascular y del 49% en el riesgo de muerte relacionada con cáncer en comparación con las personas que no realizaban ninguna actividad.
“El estudio lo que nos dice es que tenemos que movernos. Con cuatro minutos ya se obtienen beneficios, sí, pero si conseguimos hacer diez ráfagas de un minuto, mucho mejor. Y al final, repetir esa rutina de 10 ráfagas de VILPA diarias ya nos va acercando al patrón de una persona que hace ejercicio físico, al umbral de actividad física mínima recomendado por la OMS.